LAS SOMBRAS DE UNA DICTADURA Y EL LEGADO DE UN FASCISTA


Año 1976 nace Alianza Popular como una federación de pequeños partidos conservadores y de ultra derecha, algunos liderados por antiguos dirigentes del franquismo, entre ellos Manuel Fraga ministro de Información y Turismo de España entre 1962 y 1969, así como vicepresidente del Gobierno y ministro de la Gobernación entre 1975 y 1976 durante la dictadura fascista de Franco.
Tras asumir la cuestión de llevar adelante la transición junto con el resto de partidos que si respaldaban una transición democratica, no tuvieron mas remedio que seguir los pasos de partidos mas representativos como UCD y PSOE.
Sin duda alguna, 6 de diciembre de 1978, el dia mas importante para los españoles, dia en que se vota a favor o en contra de la constitución, solo Alianza Popular es el unico partido que vota en contra de la constitución con un total de 5 votos en contra y 3 abstenciones solo 8 de 16 populares votaron a favor, si comparamos con los 117 del PSOE que de forma unanime votaron a favor.
Asi pues, Alianza Popular se desmarca de la senda unanime hacia la democracia votando en contra de la constitución que ahora nos ampara.
15 de junio de 1977, se convocan eleciones y las urnas se dispensan al electorado dando 166 escaños a UCD; 118 PSOE; 19 PCE; 16 AP.
Tras los discretos resultados de AP, se formó una nueva coalición para las elecciones de 1979, a las que se presentó bajo el nombre de Coalición Democrática(CD). El candidato a la presidencia de esta coalición fue el fascista Manuel Fraga, obteniendo unos resultados peores que los logrados por su predecesor AP, con un 6% de los votos y 10 diputados.
Tras las elecciones de marzo de 1979 dimitió, continuando en la presidencia de AP. A finales de 1979 se renovó la organización de la coalición con una nueva estructura presidencial mantenida hasta la actualidad, eligiéndose a Manuel Fraga como presidente y a Jorge Verstrynge como secretario general. El 2 de septiembre de 1986, cesa como Secretario General Jorge Verstrynge y es elegido en su lugar Alberto Ruiz-Gallardón, por divergencias ideológicas.
Tras el hundimiento de la entonces gobernante Unión de Centro Democrático (UCD), Alianza Popular formó junto con algunas de sus ramas (Partido Demócrata Popular y Partido Liberal), la Coalición Popular, que se convertiría en 1982 en el primer partido de la oposición, con el 26% de los votos y 107 escaños. Similares resultados se repetirían en las elecciones de 1986, aunque descendió a 105 diputados.
En el referéndum sobre la permanencia de España en la OTAN celebrado en 1986 AP propugna la abstención o el voto en blanco. En diciembre de ese mismo año, y tras el fracaso de Alianza Popular en las elecciones autonómicas del País Vasco celebradas el mes anterior, Manuel Fraga Iribarne presenta su dimisión como presidente de Alianza Popular.
Tras un congreso extraordinario, febrero de 1987, la candidatura de Miguel Herrero y Rodríguez de Miñón es rechazada en favor de la de Antonio Hernández Mancha.
Tras la dimisión de Manuel Fraga, y las sucesivas victorias del Partido Socialista Obrero Español (PSOE) en las elecciones generales de 1982 y 1986, Alianza Popular entró en una profunda crisis. Fraga tomó entonces las riendas y, en el congreso de enero de 1989, se produjo la refundación como partido único, constituyéndose el nuevo Partido Popular, que afianzó los rasgos conservadores de AP, cambiando asi pues el collar pero no el perro. Fraga fue el primer presidente del partido, con Francisco Álvarez-Cascos como secretario general.
Poco después, el 4 de septiembre de 1989, José María Aznar (entonces presidente de la Junta de Castilla y León) fue elegido candidato a las elecciones generales, a propuesta del propio Fraga "tipicas elecciones a dedo del partido nacional popular". En abril de 1990, Aznar se convirtió en presidente del partido. Fraga, al poco tiempo, es nombrado presidente fundador del PP.
El PP ganó por primera vez con mayoría simple las elecciones generales de 1996, presentándose conjuntamente con Unión del Pueblo Navarro y Partido Popular-Partido Aragonés (PP-PAR), obteniendo 9.716.006 (el 39,18% del total de votos) y 156 escaños.
Y es cuando entra a gobernar la derecha en este país despues de desgarrar la libertad de los españoles durante 40 años de dictadura fascista.
Las primeras medidas a tomar del gobierno de Aznar se basaron en la liberalización de la economía, se privatizaron numerosas empresas públicas, como Argentaria, Enagás, Repsol, Endesa, Telefónica, Aceralia, Tabacalera, Iberia, Correos.
Se iniciaron medidas de liberalización del suelo, buscando la calificación del suelo no urbanizable que se determinase sólo en función de criterios medioambientales y paisajísticos. Una sentencia del Tribunal Constitucional, tras un recurso del PSOE, lo impidió.
Durante el primer año de gobierno popular, se transfirieron nuevas competencias al Gobierno Vasco, favoreciendo un aparente entendimiento entre PNV y PP que tuvo como representación la buena relación entre Álvarez-Cascos y Xabier Arzalluz, aunque con discrepancias en la lucha antiterrorista, fruto de numerosas críticas de los miembros del Partido Popular del País Vasco.
De todos es sabido que a la derecha le interesa el terrorismo, pues es del miedo y de las represalias donde saca beneficio.
El desgobierno de Jose Maria Aznar ya se volcó en presentar el famoso decretazo donde ponia en juego muchos de los derechos conseguidos por los trabajodores y sindicatos, donde estos no dudaron en poner al país en alerta y convocar la mayor huelga general que haya vivido un gobierno español.
Las politicas fascistas iban mas allà, en la manpulación de la información en entes públicos como Tve, la desaparión de debates de cara a cara entre políticos, las escasas ruedas de prensa del consejo de ministros.
Año tras año los escandalos iban creciendo, como fué el fraude de Gescartera; las mentiras del Prestige, un petrolero que tras las inconpenticas del gobierno del PP dejo a Galicia manchada del famoso chapapote; las mentiras iban creciendo en la gestión del acidente del Yak-42, un helicoptero militar estrellado y un comportamiento del gobierno de Aznar que dejaron en evidencia las mentiras y las manipulaciones, ya que dedicaron a identificar 30 cadáveres carbonizados tres horas y 25 minutos, el tiempo que transcurrió desde que firmaron un documento diciendo que sabían que estaban sin reconocer hasta que los repatriaron desde Turquía. Menos de siete minutos por cada cuerpo. Se equivocaron en todos. Confundieron a un negro con un blanco. Mezclaron restos de tres cuerpos en un solo féretro. Y seis años después, las familias de las víctimas del Yak-42 aún no saben por qué.

PROXIMAMENTE EL NACIMIENTO DE UN PARTIDO